Por imprudencia: Vaya manera tonta de morir

jueves, agosto 17, 2006

Ayer leía con algo de consternación la noticia de que un Ecuatoriano de 23 años se había ahogado en el embalse que solemos ir a bañarnos muchas veces en verano.

El embalse en cuestión es un tramo represado del Río Segura. Tiene hasta playa y todo. Y gracias a la vegetación y a las montañas que lo rodean por un costado, el ambiente es muy fresco. Ideal para escapar en los calorosos días del verano mediterráneo. A eso sumémosle el rico olor que expelen los árboles de eucaliptos que forman parte de la vegetación. Y ya se tiene un paseo perfecto de fin de semana.

Contrariamente a lo que dice la noticia del periódico. El baño si que esta permitido, como también lo esta el acceso a la zona. También se puede pescar pero solo en las fechas señaladas y pagando licencia. Cosa que la gente no respeta y si que lo veo muy mal. Además de dejar basura que contaminan ambiental y visualmente este bonito paraje. Y eso que hay contenedores justo al salir. Pero ni aún así... Es que no se puede ser más *****.

El lugar suele ser frecuentado mayormente por ecuatorianos, pero también por otros nacionales de países latinoamericanos, además de los nativos. Y la falta de civismo no es algo de nacionalidades, sino del ser humano. He visto con mis propios ojos a nativos arrojando basura al agua y todos tan tranquilos.

El embalse es inmenso y para cruzarlo tanto a lo ancho, como a lo largo (Esto solo un profesional) se requiere una buena condición física. Además de lucidez. Y aunque algún día se haya contado con suerte de poder cruzarlo. No todos los días nuestro cuerpo nos va a responder igual. A eso sumémosle que mucha gente bebe alcohol, ha comido copiosamente y hasta algunos han ingerido drogas (María).
Suficiente para no cometer la estupidez de dárselas de nadador Olímpico. También, esa cultura de ser el más gracioso (Con o sin gracia) que tanto abunda en Latinoamérica.
Que te puede pasar como al “Pastorcito mentiroso” que cuando sea verdad, nadie te crea. Esto ultimo fue lo que remato al difunto.

Yo una vez lo he cruzado a lo ancho, pero eso sí, con un “asistente” que iba en colchoneta de aire. Y precisamente me canse faltándome 1/3 para llegar a la orilla. Y encima que tengo miopía y vas como a ciegas.

Más prudencia gente...

1 comentario:

Marta Salazar dijo...

qué bonito debe ser el lugar!!!

y qué pena lo que pasó...